Dormir bien en tiempos de pandemia
La pandemia nos ha puesto a prueba. Se han escrito inmensidad de artículos sobre los peligros del teletrabajo, los niveles de estrés, la soledad de las pantallas. Incluso se ha llegado a acuñar la expresión “Zoom exhaustion”. Toda esta tensión nos ha pasado factura. Por ejemplo, el 52% de los estadounidenses dicen tener más dificultades para dormir y para no despertarse durante la noche.
Durante los meses de cuarentena y ahora cuando el teletrabajo se ha convertido en una realidad para la mayoría de los trabajadores, el tiempo que pasamos expuestos a la pantalla ha aumentado considerablemente. Un reciente estudio de la National Sleep Foundation ha demostrado que el brillo emitido por los aparatos electrónicos, la famosa luz azul, suprime la melatonina e interfiere con el ciclo del sueño (aunque nuestros fieles lectores ya sabían esto).
También las investigaciones en busca de como solucionar esta sobreexposición a la luz azul han aumentado. El nuevo estudio de Journal Applied Psychology, señala las gafas anti-luz azul como un factor fundamental para evitar que los niveles de melatonina bajen y así poder tener un ciclo del sueño saludable. Este estudio hace mención al “ritmo circadiano”, oscilaciones de las variables biológicas en intervalos regulares de tiempo, en otras palabras el proceso que regula el ciclo de despertase-dormirse y que se repite cada 24 horas aproximadamente.
Pero no sólo eso, también el uso de gafas luz azul está correlacionado con la mejoría de la productividad en el trabajo y la actitud organizativa, reduciendo el trabajo contraproducente al poder concentrarnos mejor. Según Cristiano Guarana de la Indian University Kelley School of Business, “la exposición a la luz azul debería ser una preocupación también para los compañías si quieren aumentar el bienestar de sus empleados”.